Delante de su hija de ocho años fue asesinado de un tiro en el pecho Máximo Ñahuis Vilches, de 62 años, en el barrio Humberto Simonovis de San José de Guanipa
San José de Guanipa.- Un disparo acabó de manera fulminante con la vida del comerciante Máximo Faustino Ñahuis Vilches, de 62 años, cuando se dirigía en un taxi a una entidad bancaria para depositar 60 mil bolívares, acompañado por su hija de 8 años.
El suceso ocurrió ayer a las 9:30 am, entre las calles José Leonardo Chirinos y Royal del barrio Humberto Simonovis, en San José de Guanipa, al sur del estado Anzoátegui.
Dos sujetos en una motocicleta de color rojo interceptaron el Mitsubishi modelo Signo gris, placas FVZ-94H, de la línea de transporte ejecutivo San Tomé Services C.A, donde iban Ñahuis, la niña y el conductor Pedro Condes.
Según relataron testigos, el individuo que viajaba de parrillero se bajó de la moto y abrió la puerta del carro para arrebatarle la bolsa donde el comerciante llevaba el dinero.
Al parecer, el hombre se resistió y forcejeó con el delincuente, quien le disparó. Una bala lo impactó en la región pectoral.
Nahuis fue llevado por el taxista al ambulatorio Fritz Petersen, donde falleció a los pocos minutos de ingresar.
En las afueras del centro asistencial, varios vecinos impidieron que el chofer huyera del lugar.
En medio de la confusa situación, la pequeña hija del comerciante fue rescatada y puesta a salvo por residentes del lugar. Sin embargo, la niña entró en un estado de shock al ver herido de muerte a su padre.
El director de Poliguanipa, Carlos Rattia Olivares, dijo que oficiales de la Brigada de Patrullaje resguardaron la escena del crimen para que los funcionarios de la policía científica realizaran las experticias y recogieran evidencias, como un casco de protección que el criminal dejó tirado en la vía.
Destacó que en apoyo a las averiguaciones, el taxista y el vehículo fueron remitidos al comando. Luego los pusieron a la orden del Cicpc.
Las autoridades activaron la búsqueda de los delincuentes.
El jefe de la subdelegación del Cicpc en El Tigre, comisario Jesús Useche Escalante, informó que interrogan a los familiares, los testigos presenciales y referenciales para luego procesar los elementos hallados en el sitio.
El móvil fue el robo. Los pesquisas no descartan que los victimarios estuvieran “dateados” sobre el dinero que llevaba Ñahuis.
La viuda Yuliska Velásquez señaló que residen en la calle Victoria del Humberto Simonovis, a dos cuadras del lugar del crimen.
La pareja posee la comercial y licorería Max Angélica, una desplumadora y una agencia de loterías. Además son dueños de un fundo.
Marido excepcional
Comentó que su esposo salió temprano con su hija para efectuar un depósito en el Banco Caroní. Después irían de compras, por lo que contrató los servicios del taxista que conocía y vive cerca de la casa. Por seguridad no le gustaba utilizar su carro y trataba de cambiar la rutina.
“Era un marido excepcional, emprendedor, buen padre, colaborador, ayudaba a quien lo necesitaba”.
Datos
El peruano Máximo Faustino Ñahuis Vilches, nació en el departamento de Apurímac. Llegó a Venezuela en busca de un futuro promisor hace 40 años, 16 de los cuales los vivió en Guanipa. Era vocero del consejo comunal de su sector.